sábado, 25 de agosto de 2012

Fallo sin falla

Es muy dificil no generalizar cuando emitimos opinión sobre temas como la educación y los padres, la justicia y los mecanismos de su control, la (im)prudencia del Ejecutivo cuando realza los valores de grupos vandálicos como los que componen los barras bravas, etc.. Casi se puede afirmar que se usan a los jueces y sus privilegios, como un arma de sujeción social a través de la liberación de condenados y la consecuente desproteción de la sociedad, cuando se culpa a todos para no condenar al responsable, cuando a los asesinos, violadores, y otras lindezas son beneficiados con salidas culturales, pasajes pagos al exterior para alentar a equipos deportivos, etc.
Sin embargo aún en los basurales informativos, podemos disfrutar del renacer de pequeñas flores. Tal me parece el caso de la información que trasncribiré textualmente, sin comentarios, ya que habla por si sola y permite creer que aún hay jueces, como también policias, políticos, y docentes entre otros, que creen que se puede volver al camino deseado, el de la justicia para todos (y todas, si algunos necesitan de esa tonta particularización).

"Condenaron a prisión a la agresora de un director de escuela:
La mujer que pasará cuatro años en prisión por atacar al docente de la escuela a la que asistía su hijo dio su versión de los hechos. No era para que hiciera tanto lío, dice la agresora del director. La mujer que golpeó al director de una escuela del partido bonaerense de Pergamino, en septiembre del año pasado y fue condenada este v iernes por la Justicia a cuatro años de prisión, minimizó el hecho al considerar que “no era para tanto”. Susana Enríquez (36) se encuentra en la penitenciaría de San Nicolás pero cumplirá la condena en la unidad de Los Hornos.
Horas después de haber sido condenada a cuatro años de prisión por golpear a Eduardo Fusco, el director de la escuela secundaria 11 de Pergamino, a la que concurría su hijo. “Esto no surgió de la noche a la mañana. Esto empezó cuando el director lo llevó a mi hijo al patio. Lo denuncié en el Consejo Escolar, en los Derechos del Niño y en la comisaría. Las agresiones contra mi hijo siguieron y yo no entendía por qué hasta que ese día volvió de la escuela llorando y me dijo que lo manoseaba”, relató Enríquez, entrevistada por el diario Perfil. En ese sentido, detalló: “Fue un ‘flash’. Me enfurecí. Fui a la escuela y había una regla o un palo. Lo agarré y le pegué una sola vez. No era para que (Fusco) hiciera tanto lío, que moviera tanto la Argentina como la movió”. Cuando se le preguntó por qué los golpes parecen ser más, respondió que el director “salió corriendo, tropezó y se golpeó la cara contra una tapa de una cámara que hay en la escuela” y aclaró: “No es que yo le pegué de esa forma. Y mi hijo tampoco. Tampoco lo amenacé ni llevamos un cuchillo. Es mentira”.
La mujer contó que tres días después del episodio la Policía fue a buscarla y aseguró que no volvería a pegarle. “Tampoco se lo aconsejo a ninguna mamá”, afirmó. En cuanto a la condena, la consideró “desmedida” y opinó: “Está mal. En realidad, la víctima es mi hijo. Está en un colegio de rehabilitación porque fue a robar para drogarse cuando mi hijo nunca se drogó. Se corta todo. Sigue sosteniendo que fue manoseado, no fue un invento”. “Creo que está mal lo que hice, pero ya pagué. Hace un año que estoy detenida. Sigo presa porque soy pobre”, subrayó. Asimismo, sostuvo: “Yo soy así, como todo ser humano. Si a mí me atacan, yo ataco. No les pego a las personas por pegarles. Vivo en un barrio agresivo, no en una zona residencial. Güemes es un barrio humilde donde hay mamás agresivas, siempre defendiendo a sus hijos”. Además, la agresora informó que tiene antecedentes, y explicó: “Todos por lo mismo. Peleas, discusiones… La gente te denuncia por amenazas. Yo soy una persona de trabajo”.
Fte: Infobae"

Tenemos que encontrar los mecanismos que desactiven esta educación para la muerte y volver a educar para la vida, buscando armonía, en sociedad . Estos padres sin control, este Estado que ¿abandona? sus obligaciones de proteger a los menores, dañan todo futuro. Mientras impere el Tanatos sobre el Eros no podremos disfrutar de lo que pretenden decirnos la generación del '60.
Volvamos a hacer el Amor.


Por: Juan Carlos Ramirez