martes, 18 de octubre de 2022

Otro 17 (y van...)

No fue este 17 uno de los que nos gusta recordar: una enorme manifestación de un pueblo unido rescatando y glorificando logros, declamados por pocas voces representativas del campo popular. Quizás porque no existieron o fueron mínimos, quizás porque la interna oficialista se expresó en muchos escenarios a la vez, tantos, que puede decirse sin temor a exagerar, que el lunes toda la ciudad fue peronista.
Tras una breve recorrida por las calles que conducen a la histórica plaza, se pudo observar que la fragmentación no afecto lo cuantitativo y que los espacios próximos al poblado escenario, fueron ganados por un gremio fuerte, cuyo líder no habló. Más dispersos, casi caótico, fue la distribución de jóvenes con abundante cotillón ya que mientras una columna enorme esperaba para entrar (lo que finalmente no hicieron), otros grupos estaban dispersos en los laterales de la plaza y al menos un centenar de ellos se marcharon hacia donde los esperaban los numerosos colectivos que los transportaron, antes de que hable su líder.
Fue muy claro el llamado del titular de la CTA, Hugo Rubén Yasky, quién señaló que el "movimiento sindical tiene un mandato, luchar por las cosas que el Gobierno tiene que garantizar… /como el/ "nivel adquisitivo", a la par que reclamó la necesidad de “distribuir la riqueza", para lo cual "hay que construir poder político… /con/ organización popular". Mientras esto lo expresaba un sindicalista diputado oficialista, otros, lejos de allí física e ideológicamente hablando, los “gordos”, se limitaban a pedir que los dejaran integrar listas que los eleven a tan preciados nombramientos. Para estar en sintonía, en La Matanza, el oficialista Pérsico prometía limpiar La Matanza (¿de peronistas?).
Regresando a la Plaza, párrafo aparte merece el mensaje de Máximo Kirchner, quien tras recordar que los que cancelaron la deuda con el FMI en tiempos de Néstor, "fueron los 45 millones de argentinos y argentinas, que aún con necesidades, trabajaban, pagaban sus impuestos para sacar este país adelante". La arenga, ancló en que no podemos darnos "el lujo de la tristeza /o/ del no se puede /porque/ tiene que haber esperanzas y esta plaza demuestra que vamos a poder salir adelante, ofrecer en el 2023 a la sociedad argentina, un proyecto de país que realmente la interprete, la contenga, la proteja, la promueva".
Esperemos se presente una plataforma que apunte a modificar las condiciones estructurales que permitieron la concentración pornográfica de la riqueza que el neoliberalismo menemista organizó gracias al peronismo “ingenuo”, y que continua y se sostiene. Esperemos se vuelvan a abrir Unidades Básicas y que las PASO, dirima internas que reagrupe al peronismo. Quien escribe esta crónica, con muchas marchas y concentraciones a cuestas, desea volver a otra Plaza en otro 17, en dónde se festeje el regreso a una Patria Justa, Libre, y Soberana.
En tanto y en el mismo día, casi en soledad, el Presidente inauguraba una autopista que se comenzó en tiempos de Menem.

Por: Juan Carlos Ramirez Leiva

miércoles, 21 de septiembre de 2022

21 de septiembre

"Era la mañana apropiada para tan esperado día. Las chicas habían trabajado mucho: empanadas, pastelitos y tartas acompañaban en las canastas a las frutas y equipos de mate. Los preparativos para los picnic primaverales se disfrutaban tanto, como el picnic mismo. La partida, como siempre, fue poco puntual. La bullanguera bañadera, quizás conducida por Don Zanelli, se desplazaba por el desparejo camino. La calle Garibaldi (hoy P. Pravaz), se encontraba flanqueada por paraísos que comenzaban a pintar de verde un paisaje que tras pocas cuadras, enriqueció por su policromía. 
Las vacas no dejaban de acompañarlos con su mirada. Imposible ignorar el paso de un vehículo no tirado por mansos pero fuertes caballos, como los que diariamente por el mismo camino, transportaban los tarros de leche a la estación. Acamparon a las orillas del río Matanza o de Los Remedios, como se lo supo llamar por encontrarse en esas tierras la estancia de igual nombre, la que cobijo la primera capilla en la región (1758). 
No muy lejos de allí, aguas arriba, algunos jóvenes de T. Suárez se reunían también para disfrutar de un chapuzón. El tranquilo cauce estaba bordeado por sauces, bajo cuya protección se extendían los manteles cual improvisadas mesas. Al trinar de los pájaros y de las exclamaciones variadas de las chicas, se les sumo el griterío alentador para los equipos que se disponían a enfrentarse en un picado."
Me es imposible no recordar los picnic de otras juventudes, más cercanas en el tiempo y que me atañen directamente. Ver el desfile por la calle French camino a la "Laguna de los perros", pasar el día cerca de las pista en dónde levantaban vuelo bimotores, cuatrimotores, avionetas y los sorprendentes aviones "a chorro", los de turbina como los Comet IV que integraron nuestra línea de bandera a partir de 1959. En épocas de la primaria, los picnic eran al Monte de la Viuda, con su hermosa arboleda y en donde podíamos chivatear tranquilos bajo la mirada distendida de nuestras queridas maestras.

No fueron pocos los 21 de septiembre que nos encontraba en los bosques de Ezeiza con toda su belleza e historias acumuladas de amores juveniles. Regresábamos muchas veces caminando dado que los "Flecha" no daban abasto; cansados y contentos. Algunos viejos me han contado de los encuentros en el bosque que se encontraba frente al edifico municipal en la calle Avellaneda. Uno de los eucaliptos de aquella época pudo sobrevivir hasta hace poco, cuando el desatino de los funcionarios creyeron que no se podía interponer en una senda para bicicletas y tuvieron la osadía y enorme torpeza de matarlo.
Recuerdo con mucho afecto, un picnic organizado por la parroquia de Ezeiza al casco de las hermanas Estevecorena, quienes generosamente abrían su propiedad para que los niños pudiéramos disfrutar de su estanque australiano, admirar el grandioso palomar y disfrutar de su entorno tan cuidado. También la familia Peña, invitaba a los niños que acudían a la parroquia, para ir una vez al año a pasar el día en el parque de su mansión.
Recuerdos, solo recuerdos, que a muchos, nos acompañan toda la vida arrancándonos sonrisas plenas de ternura..

Por: Juan Carlos Ramirez Leiva

miércoles, 7 de septiembre de 2022

Neocapitalismo y educación inclusiva

Se planteaba Eduardo Rosenzvaig, hace exactamente una docena de años, qué les proponía el capitalismo a los jóvenes. Entendía que primero les ofrecía más capitalismo; en segundo lugar los llenaba de vacíos; en tercero premiaba con el éxito si uno lograba llenarse de capitalismo y de vacíos. En caso de no alcanzar el éxito, proponía como cuarta medida, el autismo. La educación del capitalismo debía servir para las cuatro requisitorias: más capitalismo, más vacíos, más éxitos, más autismo, con menos Tierra, menos Hombre y menos Sociedad. 
Todo lo que se hace en las ciudades de marchar contra la inseguridad es un absurdo porque la inseguridad es el propio corazón del capitalismo, desde la flexibilización laboral a la cajera del súper trabajando sin el sueño peligroso de un embarazo, pero también la inestabilidad de las bolsas, del salario, del arrastre en las crisis, o los vaivenes del rating como certificado de “calidad” de la cultura. 
También Rosenzvaig sostuvo tempranamente que el capitalismo odia hoy a los jóvenes porque no los necesita o necesita a unos pocos y no sabe qué hacer con el resto, Requiere de pocos jóvenes sabiendo que el resto se volverá violento contra él, percibiendo su exclusión. Con el paso de la revolución industrial a la cibernética floreció una tecnología productiva capaz de provocar la absoluta abundancia. Pero se creó la abundancia superflua, se contaminó la Tierra, se empobreció a los hombres y la abundancia liberadora quedó postergada y enterrada. 
Los deseos de los jóvenes casi no provienen de ellos mismos sino de las empresas que financian a los Tinelli, las Susana y las Mirtha , presentes o futuras. Los jóvenes que no alcanzan el éxito capitalista son castigados/llenados. con deseos creados por esas empresas. El Paraíso al que hoy se les invoca descendió del automóvil a la telefonía móvil. Con el coche viajaban, con el celular se comunican con animadores televisivos para votar (gastando sus propios datos), para votar por un sueño que no les pertenece en tanto sus sueños (que sí les pertenecen) se hundirán en lo imposible. La autoestima se promueve por el tipo de celular que se posee. Si uno quiere ser el mejor, no tiene que ser ni el más solidario ni el más estudioso ni el más contestatario, debe tener lo máximo. Puede avizorarse que si no alcanza o se sostiene en el éxito que el capitalismo propone, el “tener para ser” será abandonado por el “mirar para ser”. Si no viste a un Don Nadie en TV, si no viste un tiktok en las redes, no se existe. 

Aunque les moleste a los progres pro bono y promoción escolar indiscriminada sin escolarización, los jóvenes pobres con esta educación son los primeros que fracasan. Si fracasa la educación, fracasa la sociedad, la que induce a los jóvenes a dejar de ser estudiantes para pasar a ser indiferentes ante el conocimiento, cuando se les anula la curiosidad, cuando se les demuestra que el conocimiento a nadie le interesa. La escuela puede constituir resistencia, o bien domesticación e indiferencia. El capitalismo asegura que quiere lo mejor para la sociedad y para ello demuestra a los jóvenes cómo el socialismo fue lo peor para la sociedad y por ello cayó. Pero esconde bajo una alfombra de hormigón armado que la crisis del capitalismo actual, una crisis civilizatoria, está poniendo en riesgo la vida humana sobre el planeta. De manera que otro modelo construido sobre las ruinas que él va dejando, no sólo es posible sino que parece ser la única alternativa. 
Los hombres ofrecen resistencia al sistema de dominación sólo si tienen convicción. La educación pública que queremos discutir está llamada a crear resistencia y convicción, con metas superadoras de la apatía actual. Si quienes elegimos para que gobiernen nos traicionan utilizando los organismos del estado para formar una sociedad ágrafa, que no comprende ni respeta los valores deseables para nosotros mismos, para el bien común, deberemos enfrentar estas políticas, Si los sindicatos relacionados con la educación no representan ideales y se nos presentan como colaboradores en la formación de una sociedad sin metas, revisemos los docentes cómo elegimos a nuestros representes. La educación debe servir para comprender la realidad y brindar herramientas que sirvan para transformarla y no para esconderla falseando evaluaciones. Las realidades por más dura que fuesen, se vuelven ominosamente más dura cuando no se resuelven problemas que además, jamás son planteados. 
La Escuela debe preparar a los hombres para que entiendan que no hay nada más seguro a la Tierra, al Hombre y a la Sociedad que los jóvenes. En esta coyuntura, los estamos dejando morir en algunos casos literalmente, en el resto, no dándole metas, herramientas, ni valores.

Por: Juan Carlos Ramirez Leiva

domingo, 17 de julio de 2022

las calles de mi Suárez.

Camino por las calles de mi pueblo 
y recuerdo mi pasado con nostalgia,
de horas muy felices que he vivido
y quedaron en mi mente muy grabadas.

Camino por las calles de mi Suárez
camino y me veo pequeñita, feliz
haciendo compras con mi padre,
o en frías mañanitas camino
de la escuela "Canale".

Pasear por estas calles tan queridas:
Belgrano, Dean Funes, Thompson y Canale,
con mi primer amor, de adolescente,
o forjando sueños con amigas,
caminando y riendo alegremente.

Camino por las calles de mi Suárez
y me veo con mi corazón de muchachita
enamorada sentada en un banco
de la Plaza Belgrano, esperándolo a él,
que a veces no llegaba.

Camino y mis pasos son lentos,
camino y se agotan los recuerdos.
¡Son tantos y tan lindos que quisiera
no apartarme jamás de todos ellos!

Y hacer el último camino cuando muera
hacia la plaza Manuel Belgrano,
que la brisa desparrame mis cenizas,
sobre esa plaza, tan querida...


Y que la brisa también las lleve
por las calles de mi pueblo: Tristán Suárez.

Nélida Fracchia
(Pichina)


viernes, 10 de junio de 2022

Día de la Afirmación de los Derechos Argentinos sobre las Islas Malvinas y Sector Antártico Argentino

El 10 de junio conmemoramos la firma de un histórico decreto que manifestó oficialmente, la firme e irrenunciable vocación de ejercer soberanía sobre nuestros sureños territorios insulares.
Con la rubrica del gobernador Viamonte se estableció en 1829, la creación de la Comandancia Cívico Militar de las Islas Malvinas. Se nombró a don Luis Vernet como gobernador, el primer gobernador de Malvinas, con el fin de evitar la acción impune y depredadora de las naves estadounidenses e inglesas.
A partir de la presencia militar, las naves que incursionaban en nuestros mares con el propósito de cazar ballenas, lobos marinos y focas, debieron registrarse y pagar un arancel a nuestro país.
Las poderosas flotas extranjeras no perdonaron la osadía de impedir que satisfagan sus intereses económicos sin costo alguno y el resultado fue que primero fueron los estadounidenses los que bombardearon la base en Malvinas y posteriormente, Gran Bretaña decidió invadir y desalojar por la fuerza a las autoridades argentinas allí legítimamente establecidas.
Desde aquel enero de 1833, Argentina no ha dejado de reclamar internacionalmente la usurpación. Lo ha hecho constantemente por todos los medios valederos, menos uno.
La trágica decisión de la dictadura que se estableció en nuestro país el 24/03/1976, al declarar una guerra inconsulta envió a la muerte a cientos de jóvenes sin que los que tomaron esa absurda medida, arriesgaran mínimamente sus vidas.
Hoy tenemos el deber y el derecho de honrar a quienes ofrendaron sus vidas para recuperar lo que el poeta llamó: Nuestra “hermanita perdida”. Hoy, bajo gobiernos democráticos, seguimos reclamando nuestros legítimos derechos con firmeza, con vocación, con respeto por quienes nos precedieron pero con respeto por la vida.

Por eso se ha establecido el 10 de junio como el Día de la Afirmación de los Derechos Argentinos sobre las Islas Malvinas y Sector Antártico Argentino (la ley 20.561 fue aprobada en 1973, durante el gobierno del General Juan Domingo Perón).
Estamos validando la memoria, expresando la misma firme decisión de todo argentino, recordando que las Islas Malvinas, son y serán argentinas.

Juan Carlos Ramirez Leiva

 

 

martes, 7 de junio de 2022

Día del Periodista

En su día, quiero homenajear a periodistas del distrito, sin agotar la lista y con total admiración.

Víctor Oscar García Costa. Escritor, periodista, historiador, coleccionista y bibliófilo. Nació el 20 de setiembre de 1932 en el barrio de Monserrat, Buenos Aires, Argentina. Como periodista colaboro y/o colabora, entre otros medios, con "La Vanguardia", "Propósitos", "Panorama", "Primera Plana", "Todo es Historia", "La Opinión", "La Voz del Interior" (Córdoba), "La Prensa", “La Palabra de Ezeiza”, y "La Nación". Fundador y director de "El Tero", "El Tábano", y la Revista "La Mesa de los Jueves". Tenía 9 años cuando apareció su primera publicación, un artículo que se llamaba “Un pobre pajarito”, aunque profesionalmente reconoce partir desde 1941. Vive en El Trebol y esta próximo a cumplir sus 90 años, siempre activo, siempre siendo una guía de principios irrenunciables. Un orgullo para el Distrito.
Julián Sanchez Parra. Su familia se instaló en French y Libertad, al lado de la parroquia, en 1947. En una comunidad aún pequeña, el joven Julián no tardó en ser conocido. En 197O publicó el periódico Notas y Noticias, y prácticamente arrancó con el famoso Montegrandazo. Tuvo la capacidad de hacer hablar al recién nominado intendente de facto, el Comodoro Arana, en su presentación social. Tras una cena copiosa tanto en comida como en bebida, Julián le acercó el micrófono y el nuevo jefe comunal dijo desconcertantes palabras: “Un saludo pa´ mi mama que me está escuchando…". No pasó mucho tiempo antes que Monte grande se levantara en pleno contra su gestión. Supo hacer el esfuerzo de publicar Relatos y Retratos, en formato fotocopias, esfuerzo que también realizaba la periodista Bini Peñuelas con El Morueco Terenciano, desde el Barrio Uno.
Clara Gagni. En 1963 comenzó a distribuirse a la salida de los servicios religiosos del domingo, una hoja oficio doblada al medio, escrita con una máquina Underwood y mimeografiada manualmente: “La voz de mi Parroquia". A partir del 5 de noviembre de 1988, la Vice Directora Clara Gagni asumió la dirección y junto a Estela Pelly, llevaron adelante la publicación hasta 1995.
Hugo Goncalvez (1952-2020). Siempre quiso ser periodista, y lo fue. Apenas terminó la secundaria se propuso conseguir trabajo, pero no uno cualquiera y con ese propósito le escribió a don Américo Barrios. No se conformó con colaboraciones y fundó el periódico “La Verdad” mientras se desarrollaba la Guerra de Malvinas. La experiencia que ganó junto a su socio, el recordado Daniel Filloy, le abrió las puertas del diario La Prensa. Una de las satisfacciones en su devenir periodístico epistolar, fue su contacto con Mónica Cahen D’anvers, a quien conoció en el Montegrandazo, histórica revuelta vecinal contra la dictadura de turno (6/10/1970). Por ese entonces Hugo trabajaba en el diario Notas y Noticias, que dirigía Julián Sánchez (luego Sánchez Parra).

Nuestro homenaje a todos los periodistas, a quienes he tratado de honrar con el recuerdo de algunos pocos (la lista no se agota y daría para escribir un libro sobre ellos).
Mil gracias a Víctor Oscar García Costa, quien enseñó, enseña y seguirá enseñándonos, los caminos que obligatoriamente deberían recorrer los intelectuales para estar al servicio de su comunidad.
Victor Oscar Garcia Costa junto a la periodista Patricia Celia Faure


Juan Carlos Ramirez Leiva

jueves, 2 de junio de 2022

Con vocación de bomberos

Los bomberos son personas de una fuerte vocación que suele manifestarse a muy temprana edad, especialmente si hay un cuartel cerca de su domicilio. Tal es el caso de Hernán Banchero, quien relata que “Llegaba de la escuela y lo primero que hacía, iba al cuartel”, desde que tenía unos diez años. Se vinculó con la profesión al comienzo de la década de 1980, recibió su licencia en 1987 y no paró hasta ser Jefe de Bomberos del Destacamento N°2 de Ezeiza; destacamento que vio nacer y destacamento que lo vio crecer “como persona y profesional”.
Ezeiza, bajo la jurisdicción municipal de Esteban Echeverría, no contó con una unidad de bomberos hasta el 3 de junio de 1980, cuando la familia Aranda facilitó un predio para ese fin sobre la Ruta nacional Nro. 205 (hoy Av. Néstor Kirchner), entre José María Ezeiza y Crisólogo Larralde. Para 1982, ya estaban en su lugar propio, sobre Balcarce casi esquina Tucumán, al lado de la casa de la abuela de Hernán Banchero.
El “Zurdo” Alejandro Javier Cáceres, no olvidó jamás que su primer intervención fue el 10 de diciembre de 1988 en Ezeiza, en un incendio de pastizales, junto a Horacio Bottaro. Recuerda que la gente los convido con empanadas hechas por una señora mayor.
Los Bomberos Voluntarios de Tristán Suárez y Carlos Spegazzini, cumplieron 47 años al servicio de la comunidad. Horacio Rodríguez, hoy presidente de la

Comisión Directiva de los Bomberos de Tristán Suárez y Carlos Spegazzini, pertenece a la primera camada de voluntarios, de aquel 7 de abril de 1974. Cuentan que la unidad ya lleva realizado más de 35 mil procedimientos de incendios y situaciones de riesgo.
Cuando los integrantes del Tribunal que juzgaron los crímenes cometidos en el centro de detención clandestino El Vesubio, llenaron de preguntas a Daniel Aníbal Cassimelli, lo que querían conocer era qué había pasado en aquel amanecer de mayo de 1977, cuando alguien llamó al Cuartel de Bomberos de Monte Grande para ordenar que fueran a levantar dieciséis cadáveres de una casa sobre el bulevar Buenos Aires (entonces Uriburu). Para esos tiempos, se había convertido en cosa normal el “ir a buscar cadáveres a las casas o Ezeiza.” Daniel era bombero voluntario del cuartel de Monte Grande y trabajaba durante el día en el Centro Atómico de Ezeiza. Ya le había tocado cargar el cuerpo de Silvio Frondizi cuando lo asesinaron y tiraron su cuerpo en los bosques de Ezeiza, así como ir hasta una casa del Camino de Cintura a buscar otros tres muertos de la represión. Cassimelli contó que habían pensado en “poner un cartel que dijera prohibido tirar cadáveres”.
Claro que acorde a estos tiempos y después de no ardua lucha por la igualdad, las mujeres también pasaron a integrar las dotaciones de bomberos y nuestros destacamentos no se quedaron atrás en ello. Cuando en enero de este año se desató un gran incendio de pastizales, tres mujeres formaron parte de las 7 dotaciones de bomberos que combatieron el feroz incendio en Canning. Una de ellas fue María del Carmen, perteneciente a la división de bomberos de Ezeiza, quien supo contar que: "Estamos acá por gusto, por pasión. Es muy difícil de explicar. Nos vamos lastimadas, cortadas, con calor, pero estamos. Es una pasión", aseguró.
Pionera en Ezeiza fue la oficial Aida Hermo (su viudo también es bombero), quien viviera sobre la calle Echeverría a metros de la barrera de P. Pravaz. No menciono otras mujeres bomberos por miedo a olvidarme injustamente de algunas. Pero si vaya nuestro eterno agradecimiento a quienes dejan a su familia y arriesgan su vida por el prójimo.

Por: Juan Carlos Ramirez Leiva

martes, 22 de marzo de 2022

Eduardo Alberto Duhalde

Serie: Los protagonistas de siempre

Eduardo Alberto Duhalde inició su militancia en el Sindicato de Empleados Municipales como delegado, luego como Secretario Administrativo, a la par que se desempeñaba en la oficina de Asuntos Legales. Se afilio al Partido Justicialista y en pocos meses consiguió la confianza de los principales dirigentes de las 62 Organizaciones local, en donde se destacaba Lorenzo Miguel, vecino temporario de Villa Guillermina (J. M. Ezeiza).
Fu
e Rodolfo illescas, Secretario Gremial de la regional CGT y 62 Organizaciones Peronistas (la derecha sindical), quien postuló a Duhalde como concejal. En las elecciones de 1973, fueron elegidos Pablo Turner (de La Tendencia) como primer concejal, quedando como segundo concejal el recién recibido de abogado, Eduardo Alberto Duhalde, mientras que fue electo Intendente de Lomas de Zamora, Ricardo Ortíz, todos del Frente Justicialista de Liberación (FreJuLi). Ortíz fue desplazado a los ocho meses de gestión por irregularidades en su gestión, siendo reemplazado por P. Turner (tenía por compadre a Raimundo Ongaro y al líder del “Cordobazo”, Agustín Tosco).
La
 intendencia de Turner no llegó al año, jaqueado por maniobras de las autoridades del gremio de municipales (línea ortodoxa) del peronismo, cuyo abogado era Duhalde. El CD votó la suspensión del intendente y su reemplazo por el presidente del CD Eduardo Duhalde, apoyado por el Sindicato de Municipales y la Iglesia, y el golpista gobernador V. Calabró.
E
l 21 de marzo de 1975 se produjo un hecho que junto a otros similares serían un anticipo de las tragedias que vendrían con la llegada de la dictadura cívico eclesiástica militar, cuando más de 400 ciudadanos en Lomas de Zamora fueron víctimas del terrorismo de estado: “La masacre de Pasco”.


A un mes de ocurrida, la Juventud Peronista organizó un acto relámpago en la intersección de las calles Pasco y Salta. Arrojan volantes en donde denuncian el hecho. En el volante denuncian a la Comisaría Nº 1 de Lomas de Zamora, responsabilizan al intendente Duhalde por fomentar desde la municipalidad la aparición de grupos parapoliciales. Durante el gobierno de Duhalde se produjeron la mayor cantidad de encarcelamientos y asesinatos a militantes en la historia de L. de Zamora. El 17 de octubre de 1975, el Día de la Lealtad, Duhalde organiza y preside la columna que parte desde la plaza de Lomas, ya que hablaría Isabel de Perón. La columna ingreso a la Plaza de Mayo cantando:” A la lata al latero, queremos la cabeza de los jefes montoneros”. Repetiría la historia con la “Masacre de Avellaneda”.

Juan Carlos Ramirez Leiva

La Masacre de Pasco

El 21 de marzo de 1975 a las 21.30 hs., ocho vehículos, varios Ford Falcón (de color gris y otros negros), y algunos Torino blancos, llegaron a Donato Álvarez a metros de la Avenida Pasco (barrio San José, Temperley). Algunos llevaban balizas iguales a las utilizadas por la policía, otros traían valijas sobre el portaequipaje. Bajaron entre quince y veinte personas de civil con capuchas negras, aunque uno llevaba una máscara de carnaval y otros dos la cara descubierta.
Sobre D. Álvarez funcionaba el bar y almacén El Recreo y allí irrumpieron violentamente los encapuchados preguntando por Lencina, el mozo Luís Ortiz respondió que el concejal no estaba allí, y la reacción fue con ráfagas de ametralladoras sobre las paredes, el mostrador, la estantería y la heladera, mientras rompían mesas y sillas. Robaron relojes, dinero y objetos de valor a los presentes, y según el parte policial, se robaron un colectivo.
Héctor Lencina, Coca Rapari, y Alejandro, el hijo de ambos vivían en Donato Álvarez 47, justo al lado del bar. Héctor había invitado a Aníbal Benítez y a su esposa Gloria a cenar en su casa y mirar un partido de futbol. El matrimonio llevó a la bebita de ambos, recién nacida, también se encontraba Cristina Rapari en tanto Coca se encontraba ausente. La velada fue interrumpida por hombres con máscaras que se apoderaron del edil y de Aníbal Benítez, introduciéndolos en uno de los autos, mientras otros destruyeron el lugar arrojando bombas incendiarias.
La patota de la Triple A continuó hacia Pasco al 4600, domicilio de la vice presidenta del Concejo Deliberante Irma Santa Cruz en donde los parapoliciales destruyeron puertas y ventanas, se llevaron documentación y objetos de valor y capturaron a Héctor Flores, ex-secretario de Irma Santa Cruz, quien militaba en el barrio Los Pinos de Llavallol. Los terroristas continuaron a una casa ubicada entre las calles Lules y El Hornero, secuestrando a los hermanos Alfredo Díaz y Rubén Eduardo Díaz de 18 y 16 años, respectivamente; también introdujeron en los vehículos a Pedro Rubén Maguna y Germán Gómez. Los vecinos contaron que Germán gritó:” Eras vos, flaco hijo de puta…. Bajen a los pibes que no tienen nada que ver”. Aparentemente se refería a un soplón de apellido Salazar que trabajaba en la Comisaría 1era de Lanús. Los vecinos de Salazar relataron a los Díaz que cada vez que el policía se peleaba con su mujer, ella le gritaba: “Asesino, hiciste matar a los Díaz”. Se cree que Alfredo y Eduardo reconocieron a alguien, por eso los secuestraron.
Al lado de la casa de Germán vivía Rubén “Cacho” Maguna, quien probablemente fue confundido con un tal Chacho; Rubén no resistió el maltrato que ejercían sobre su esposa embarazada, reaccionó y los encapuchados se lo llevaron. A continuación, fueron a la calle Amenedo al 3900 casi esquina Santiago del Estero (barrio San José; Mármol, partido de Almirante Brown), en donde vivía Guillermo Omar Caferatta con Gladys Martínez (21 años). Omar no se encontraba porque había viajado a Australia, pero Gladys fue baleada y rematada y su cadáver fue hallado sobre la cama junto a dos artefactos explosivos que no estallaron.
La caravana llegó hasta Santiago del Estero y Sánchez, en donde los siete secuestrados fueron bajados a empujones y obligados a arrodillarse. Uno de ellos pidió que, si lo tenían que matar lo hicieran de pie, mientras otro gritó: “Viva la patria”. Los balearon y colocaron los cuerpos juntos e hicieron estallar dos granadas que al detonar hicieron volar los cuerpos, arrojando a gran distancia a varios de los cadáveres horriblemente mutilados. La carga habría sido colocada junto al cuerpo del concejal Lencina, ya que éste apareció horrorosamente mutilado. Su cuerpo, al ser proyectado hacia arriba cayó sobre un cable eléctrico provocando un corte de energía en un amplio radio del lugar.
En la intersección de las calles Sánchez y Santiago del Estero yacía uno de los cuerpos, únicamente el tronco sin extremidades; a unos 40 metros y sobre la calle Canale, otro cuerpo presentaba únicamente la parte superior del tronco a unos 25 metros yacía un cuerpo completamente destrozado y diseminados por las inmediaciones se veían restos de extremidades de los cadáveres mencionados. Los cráteres producidos por los artefactos explosivos se veían sobre la calle de tierra y según los vecinos, la onda expansiva provocó la rotura de cristales y televisores hasta diez cuadras a la redonda. Los terroristas colocaron una bandera de 2 mts. de largo por 0,65 cm. de alto, de color blanca con la siguiente inscripción: “Fuimos Montoneros, fuimos del ERP” en aerosol rojo y una estrella de seis puntas.
Esa noche, Carola, una vecina se acercó hasta la casa de Caferatta temiendo encontrar entre las víctimas a alguno de sus hermanos. La vio a Gladys sin vida, y también el cuerpo de un joven alto de pelo ondulado tirado al lado de la heladera. Nunca supo de quién se trataba, ni siquiera los diarios registraron el nombre de esa persona. Se conjetura que fue alguien que busco allí refugio, pero lo agarraron en la casa.
Alrededor de las 11 hs. del día siguiente culminó la tarea de recoger los despojos, los que fueron trasladados a la Morgue Judicial de Avellaneda. Todo el perímetro fue vallado por la policía. Aquello era una montaña de restos humanos, pedazos de ropa desperdigados. Todos los 21 de marzo, en el cementerio de Lomas se recuerda a las víctimas de la Masacre de Pasco y a los más de cuatrocientos asesinados por el Terrorismo de Estado en Lomas de Zamora.

Juan Carlos Ramirez Leiva

Fuentes:
Rodriguez Heidecker, Patricia Miriam. La masacre de Pasco
Honorable Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires
Concejo Deliberante de Lomas de Zamora
Recortes periodísticos

miércoles, 23 de febrero de 2022

La tragedia educativa

Tal era el título del libro original de Jaime Etcheverry, que hoy tiene una secuela más trágica aún, por los resultados obtenidos con tanta militancia desprovista de capacitaciones en cargos educativos. Debería volver a ser de lectura imprescindibles en los ISFD, el Epílogo de la obra mencionada.
Hoy el autor nos recuerda que la escuela ha perdido su rol de integración y de promoción social. Ante la obviedad de que los que m
ás necesitan educación son los que están en peores condiciones socioeconómicas, las políticas educativas (al menos en la provincia de Buenos Aires), han profundizado esas condiciones.

Ya es de Perogrullo sostener que la escuela lejos de promover socialmente agrava la brecha.
Parafraseando una vieja canción diría que jugamos desde el Estado a educar en guetos: "Los ricos con los ricos, los pobres con los pobres".

Recuerda Etcheverry: "El proyecto fundamental de nuestra educación fue el de integrar a los inmigrantes y construir ciudadanía. Y eso sigue siendo fundamental: integrar y formar ciudadanos”. 

Creo que hoy, más que nunca, debemos ser militantes de la educación ( https://pensandodesdeezeiza.blogspot.com/2009/03/militantes-de-la-educacion-o-la.html )

Post Scriptum (😎): El gobernador y ministros deben poner a trabajar a los organismos estatales, supervisando resultados, no avalar políticas educativas fracasadas y sus parches. Pasamos por un momento histórico en que la escuela debió cumplir funciones contenedoras no educativas, pero a casi dos décadas después, debe retomar sus funciones específicas. La contención y provista debe ser encauzadas por organismos competentes y no por docentes,
Y n
o estaría mal, volver a profesionalizar las funciones, dejando a los asistentes sociales que actúen y superar la etapa de las manzaneras.

Juan Carlos Ramirez Leiva