-¿Hace cuánto tiempo transita los caminos de la docencia? ¿En qué cargo se encontraba allá por los años 90', cuando fue sancionada la Ley Federal de Educación?
Comencé en superior, en el INSP Joaquín V. González, como ayudante de la cátedra Teoría e Historia de la Historiografía. Ingrese al sistema bonaerense a mediados de la década de 1990, cuando se estaba implementando la Ley Federal de Educación y se dejaba de lado la Ley 1420, la que nos dio tantos premios Nobel.
-¿Qué consecuencias generaron su implementación?
Se destacaba que al tomarse centralizadamente decisiones y planificaciones pedagógicas, se elaboraban directivas que desconocían las particularidades de cada contexto. Acordes a los tiempos neoglobalizados, se dieron más autonomía a las escuelas, se inició un proceso de descentralización más declamado que real. Los cambios implicaron reformas curriculares y estructurales y como consecuencia de la reforma se dejaron de lado las escuelas primaria y secundaria, las que fueron reemplazadas por la EGB y el Polimodal.
Las escuelas no disponían los recursos necesarios para tal propósito, por lo que no había ni el espacio, ni el personal, ni materiales didácticos apropiados. Como consecuencia de la implementación se pudo pedir recursos para ampliar los edificios y para equipamiento, pero el dinero, las partidas, venían ya imputadas de acuerdo con decisiones que no se tomaban en la escuela.
-¿Recuerda las dificultades que surgieron en las escuelas al aplicarse el cambio de modalidad Educación Primaria y Media a EGB y Polimodal?
Nuestra provincia fue la primera que la implementó, instalando 7mo. año en 1996, 8vo. año en 1997 y 9no., un año después; es decir, no había modelo previo. El Tercer Ciclo comenzó a funcionar dentro de la escuela primaria, aunque ahora fuera EGB primer y segundo ciclo. Los directivos de la ex primaria se transformaron en directivos de cursos que ahora incluían a los que había sido el primer y segundo año de la escuela secundaria. Es decir, se primarizaron los años iniciales de la ex secundaria. Los estudiantes de mayor edad se mezclaban con los más chiquitos, con lo que hubo que idear recreos diferenciados con el resultado de que la escuela era un eterno recreo, dificultando la concentración.
No había dirección pedagógica real porque los directivos de la ex primaria no se consideraban preparados para supervisar a los profesores, un caos institucional que se resolvió mediante la buena voluntad de todos. De lo acordado o directivas, se notificaba por escrito porque se hacía imposible reunir a todo el personal en el mismo horario. Se hizo necesario desarrollar un P.E.I., un proyecto escrito que quedara en la escuela más allá del recambio de directores y docentes, un proyecto temáticos, de expectativas de logro, evaluación y compensación, hasta horarios de clase, recreos, actos, etc..
-¿Tuvo compañeros maestros de grado que, debieron ser reconvertidos para conservar su fuente de trabajo? ¿Recuerda en qué consistía la reconversión?
Las improvisaciones tienen su costo y el costo fue el descreimiento. La reconversión, palabra de moda en esos tiempos, era una broma. Se trataba de responder preguntas básicas, colectivamente. Ello movilizó lo corporativo ya que en un par de horas se pasaba de un título a otro y el mercado de trabajo alteraba las reglas de juego. Los maestros podían reconvertirse en más de un área mientras los profesores quedaban prisioneros de su titulación. No era la primera vez que se atacaba al profesorado, ya en los finales de los ochenta se intentó reemplazar ese título por el de maestro especializado; al final se logró, la calidad de formación del docente decayó. Sin olvidar que un maestro con estudios generales de tres años de duración, supervisaba a profesionales de cuatro años o más de formación, ya que muchos veníamos de licenciaturas.
-¿Considera que la extensión en la obligatoriedad escolar contribuyó a mejorar la calidad educativa? ¿Por qué?
Un eje de transformación fue la implementación de la educación obligatoria organizada en ciclos de 3 años, totalizando 10 años, además de buscar mayor retención de matrícula, y es por eso que la conducción de la EGB quedó a cargo de la dirección de la antigua escuela primaria. La primarización anuló el efecto benéfico de la extensión.
-¿Cree que podría mejorar la educación en la actualidad? ¿De qué manera?
No hay reforma, cambios, sin un propósito declamado de la búsqueda del bien y si en aquella ocasión fue mejorar la formación para lograr una mejor inserción social y laboral y no se logró, podemos seguir insistiendo en los mismos puros propósitos.
La manera tiene que ver con los recursos que se ponen a disposición. Si la profesión sigue siendo mal paga y bastardeada, quién va a querer ser docente; con qué tiempo y dinero se va a capacitar. Si los directivos no tienen autoridad para calificar a sus docentes, ni sobre los alumnos; si las autoridades distritales imponen números favorables que en la práctica lleva a mentir sobre la deserción y a promocionar a chicos que no han sido preparados, no hay posibilidad de cambio alguno. Súmele a ello la falta de escuelas y la sobre matriculación en cursos, edificios derruidos, sin computadoras ni internet, no podrá hacerse gran cosa.